Es un término utilizado para describir la producción de películas por parte de comunidades religiosas con el fin de expresar sus creencias a través del lenguaje cinematográfico. La producción de cine religioso se enfoca en contar historias que reflejan la vida y la fe de las personas y comunidades religiosas, y utiliza técnicas cinematográficas para crear una experiencia visual y emocional para el espectador.

Para producir cine de mensaje, de calidad, es importante que las comunidades religiosas tengan conocimientos técnicos sobre la producción de cine. Esto incluye habilidades en el uso de cámaras, iluminación, edición, sonido y otros aspectos técnicos de la producción cinematográfica.

Además, es fundamental que los productores de cine de contenido espiritual comprendan cómo utilizar el lenguaje cinematográfico para transmitir su mensaje de manera efectiva. Esto implica la selección cuidadosa de los elementos visuales, la utilización de simbolismo y metáforas, la creación de personajes y el uso de técnicas narrativas para contar historias emocionantes y significativas.

En resumen, «Cine que sala» es un término que describe la producción de cine de mensaje por parte de comunidades religiosas, con el objetivo de expresar sus creencias a través del lenguaje cinematográfico. Para producir cine religioso de calidad, es necesario tener conocimientos técnicos y comprender cómo utilizar el lenguaje cinematográfico para transmitir el mensaje de manera efectiva.